Datos obtenidos por la Federación Frontera revelan el alcance de las desapariciones forzadas por parte de EE.UU. a través de la frontera
Ciudad de México, 10 de julio de 2025. Más de 70,500 personas no mexicanas, en su mayoría provenientes de Venezuela, han sido deportadas a México por el gobierno de Estados Unidos, según datos del Instituto Nacional de Migración obtenidos por la Federación Frontera. Tanto los gobiernos de Estados Unidos como de México saben que las personas migrantes son un blanco sistemático de secuestros con fines de extorsión, extorsión económica, agresiones sexuales y otros daños por parte de grupos del crimen organizado, así como de actores estatales mexicanos.
Las deportaciones de personas no mexicanas a México constituyen desapariciones forzadas, es decir, privaciones de la libertad con apoyo estatal, por lo que ambos países deben rendir cuentas.Las desapariciones forzadas son particularmente peligrosas porque durante el proceso las personas quedan fuera de la protección de la ley y del debido proceso, lo que las deja vulnerables a otras violaciones de derechos humanos, incluida la tortura.
“Estas deportaciones ilegales no serían posibles sin la estrecha colaboración del gobierno mexicano”, afirmó Ari Sawyer, codirector de la Federación Frontera. “Ante los planes de Trump de intensificar las redadas fascistas en comunidades de EE.UU. y las detenciones y deportaciones abusivas, la presidenta Sheinbaum debería dar el ejemplo y poner fin, de una vez por todas, a las desapariciones forzadas que ponen en peligro la vida de las personas deportadas a México.”
Los datos abarcan el período entre el inicio de las deportaciones de personas no mexicanas a México en marzo de 2023 bajo los expresidentes Joseph Biden y Andrés Manuel López Obrador (tras la implementación del Título 42, que permitió a las autoridades estadounidenses expulsar rápidamente a solicitantes de asilo en la frontera sin el debido proceso) y junio de 2025, cuando las deportaciones han continuado bajo acuerdos establecidos entre los presidentes Donald Trump y Claudia Sheinbaum.A pesar de los graves riesgos involucrados, el número de personas no mexicanas deportadas a México por Estados Unidos incluye a casi 5,000 niños y niñas en situación de vulnerabilidad, según los datos. (Consulte la tabla a continuación para ver el desglose por nacionalidad.)
La práctica de enviar personas no mexicanas a México comenzó bajo la primera administración de Trump, cuando el expresidente López Obrador accedió a permitir que Estados Unidos enviara refugiados a ciudades fronterizas mexicanas bajo la ahora extinta política de "Permanecer en México", mientras esperaban sus audiencias en cortes de inmigración estadounidenses. Bajo esta política, las redes de secuestro y las ganancias de los cárteles se dispararon, con los cárteles contactando a familiares de migrantes en EE.UU. para exigir rescates en dólares estadounidenses.
Biden continuó expulsando, retornando o rechazando a cientos de miles de solicitantes de asilo y otras personas desplazadas a la fuerza a través de la frontera entre EE.UU. y México, incluso bajo el Título 42, la continuación de la política de "Permanecer en México", que obligaba a los solicitantes de asilo a esperar en ciudades fronterizas peligrosas mientras se tramitaban sus casos, y el sistema digital de citas CBP One, que racionaba las entrevistas de asilo y contribuyó al aumento de redes de secuestro en el sur de México. El secuestro con fines de extorsión es ahora un pilar central del modelo de ganancias de los cárteles, lo cual contradice las afirmaciones de EE.UU. de que sus políticas de disuasión fronteriza buscan debilitar a los grupos criminales organizados en México, donde más de 111,000 personas han sido desaparecidas y continúan sin ser localizadas.
Como en muchas de estas otras políticas, la detención incomunicada y deportación de personas no mexicanas a México constituye desaparición forzada llevada a cabo tanto por Estados Unidos como por México. México es signatario de la Convención Internacional para la Protección de Todas las Personas contra las Desapariciones Forzadas, que prohíbe expresamente “el arresto, la detención, el secuestro o cualquier otra forma de privación de libertad por agentes del Estado o por personas o grupos de personas que actúen con la autorización, el apoyo o la aquiescencia del Estado.” De hecho, el gobierno mexicano ha intensificado frecuentemente las desapariciones forzadas al tomar a las personas deportadas bajo custodia, detenerlas en régimen de incomunicación y trasladarlas durante varios días al sur de México, generalmente sin evaluarlas para determinar si requieren protección. Los datos que obtuvimos indican que alrededor de 6,611 personas fueron trasladadas por la fuerza a los estados de Chiapas y Tabasco. Ese número incluye a dos ciudadanos estadounidenses y 2,357 niños.
“La Federación Frontera ha lanzado una campaña para investigar y responsabilizar a los actores estatales involucrados en desapariciones forzadas de personas desplazadas no mexicanas en México como resultado de las políticas migratorias y fronterizas conjuntas de EE.UU. y México”, dijo Sawyer. “Instamos a ambos gobiernos a tomar medidas inmediatas para poner fin al peligro que enfrentan las personas migrantes y, en su lugar, implementar políticas que respeten los derechos humanos y la dignidad.”
Total de personas no mexicanas deportadas a México por Estados Unidos, del 1 de enero de 2023 al 2 de junio de 2024
Fuente: Instituto Nacional de Migración, México
Nacionalidad | Total |
---|---|
Venezuela | 43,558 |
Guatemala | 10,543 |
Nicaragua | 6,703 |
Cuba | 5,584 |
Honduras | 2,647 |
El Salvador | 863 |
Haití | 343 |
Otras | 284 |
Total combinado | 70,525 |